DANCE ME TO THE END OF LOVE

“No hay música de ningún otro artista que sonara e hiciera sentir como la de Leonard Cohen.

El canadiense fue un músico, poeta y novelista muy exitoso, considerado por el periodista Bruce Eder como “uno de los cantantes y compositores más fascinantes y enigmáticos de finales de los años 60”.

En 1956 publicó su primer libro de poemas a los 22 años y desde entonces, la literatura y la música se adhirieron a su ser como si de una extremidad más se tratase. Grabó su primer disco en el 68, pero fue en los ochenta cuando su voz adquirió ese matiz susurrante y profundo que la convirtió en icónica y reconocible a partes iguales.

 

Su último disco “You want it darker” esta lleno de mensajes en los que afirmaba que estaba preparado para el final y nos demuestra como la poesía forma parte de vida. El legado del cantautor canadiense es infinito.

Antes de que Dylan conquistara este año el Premio Nobel de Literatura, Cohen fue el primer músico que sonó para hacerse con el mismo. La carrera de Leonard ha estado llena de galardones y reconocimientos, entre ellos el Premios Príncipe de Asturias en el año 2011.

Hoy recordamos al hombre del traje negro, de la sonrisa irónica, del eterno sombrero borsalino. El mismo que hace poco prometió llegar a los 120 años, mientras afirmaba que también estaba preparado para la muerte.
Adiós, Leonard. Nos vemos en el otro lado.

Quizá todavía esté dolido y no pueda poner la otra mejilla. Pero tú sabes que aún te amo. Te busque en todas. Y ellas me lo echaron en cara. Viví en soledad, pero sólo estaba volviendo contigo… (Leonard Cohen)